Aquí te dejamos ideas y consejos que conectan con lo que vivimos en RD y que puedes aplicar desde ya, sin volverte un chef profesional ni gastar un dineral.
1. Compra con cabeza, no con hambre
Lo primero es armar una lista pensando en platos que se puedan repetir, variar y rendir. Algunos clásicos que nunca fallan en la mesa dominicana:
- Locrio (de salami, pollo o sardinas)
- Habichuelas guisadas
- Albóndigas o carne molida
- Pollo guisado o al horno
- Ensalada hervida o repollo con zanahoria
- Arroz blanco (¡porque es ley!)
Aprovecha los combos del colmado, las ofertas del súper, o las ferias de productos locales. Cocinar con lo que hay también es parte del truco.
2. Cocina un día, come cinco
El truco del famoso meal prep no es hacer platos de restaurante, sino tener la base lista. Por ejemplo:
- El domingo en la tarde cocina 2 tipos de proteínas, 1 legumbre, 1 arroz y 1 vegetal hervido.
- Guarda en porciones individuales en envases plásticos.
- Deja dos porciones listas en la nevera para lunes y martes, y el resto al congelador.
Así, durante la semana solo calientas, quizás añades una ensalada fresca, o haces una pequeña variación (un locrio rápido con lo que sobró del pollo, por ejemplo).
3. Reinventa, no repitas
Aquí está la magia: lo que cocinaste no tiene que verse igual todos los días. Ejemplo:
- Las habichuelas del lunes se convierten en crema de habichuelas con pan tostado el miércoles.
- El arroz blanco se transforma en chofán con vegetales y huevo.
- La carne guisada de ayer puede ser relleno de una arepa salada o empanadas.
¡La cocina dominicana es versátil! Con sazón, cualquier reinvención sabe bien.
4. El congelador es tu aliado
No le tengas miedo al freezer. Guarda porciones de arroz, habichuelas, carnes ya cocidas, incluso guisos completos. Solo recuerda etiquetar y fechar.
En días complicados, solo sacas, calientas y listo. Nada de pasar hambre ni de estar comiendo comida chatarra por falta de tiempo.
5. Incluye meriendas criollas
No todo es comida grande. Para evitar los “ataques” de media mañana o tarde, ten lista alguna merienda típica y fácil:
- Batata hervida con miel
- Un guineo maduro
- Yogur con avena
- Pan con pasta de aguacate o huevo
- Fruta picada (piña, lechosa o melón)
Esto también te ayuda a controlar el presupuesto, y no andar comprando “picaderas” todos los días.
Comer bien no es lujo, es planificación
Organizar tu comida semanal no se trata de complicarte, sino de tener el control. Comer con sabor, ahorrar tiempo y rendir los pesos es posible, y más si lo haces con los sabores de aquí.
La cocina criolla tiene todo lo necesario para lograrlo: sazón, tradición y creatividad. Así que, ponte el delantal, planifica lo tuyo, y demuestra que en la mesa dominicana no se negocia el sabor.
