«Honestamente, se siente muy diferente a un partido de temporada regular. Ni siquiera me di cuenta de que estaba en racha (en el tercer cuarto). Estaba jugando con tanta intensidad que todo lo demás en el juego parecía secundario comparado con lo que estaba pasando», afirmó.
«Así es como se siente, así que ni siquiera diría que estaba como flotando. Más bien estaba tan absorbido por el partido que no estaba pensando en cuántos puntos tenía o cuántas veces había anotado. Simplemente estaba metido en el partido, añadió.
Williams insistió en que no deben lanzar las campanas al vuelo porque todavía les falta una victoria y subrayó el apoyo que recibió de su equipo para poder brillar en una noche así.
«Para mejorar y rendir bien en estos momentos, y de ninguna manera digo que sea perfecto en ellos, uno puede generar buenos hábitos cuando tiene la manera correcta de afrontarlos y cuenta con un proceso», explicó.
«Tengo muchísima suerte de contar con un entrenador, un cuerpo técnico y unos compañeros que me permiten cometer esas jugadas feas durante el año y así poder entender y desarrollar mi juego», agregó.
Williams firmó la actuación más importante de su carrera con 40 puntos (14 de 25 en tiros de campo con 3 de 5 en triples y 9 de 12 desde la línea de personal), 6 rebotes y 4 asistencias.
Logró así su nuevo récord de anotación en ‘playoff’ y se unió a Russell Westbrook como el único ‘thunder’ con 40 puntos o más en las Finales.
Los Thunder vencieron este lunes por 120-109 a los Pacers y se situaron con 3-2 en la serie por el anillo.
En la historia de las Finales que llegaron al cuarto encuentro empatadas por 2-2, el equipo que se impuso en el quinto duelo conquistó el título en el 74,2 % de las ocasiones.
Los Pacers, con Tyrese Haliburton entre algodones y solo 4 puntos en una noche en la que estuvo mermado físicamente, deberán ganar el jueves el sexto partido en Indianápolis para forzar un séptimo encuentro que se jugaría el domingo de vuelta en Oklahoma City.
