Agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), en coordinación con miembros del Ministerio Público y con el apoyo de alguaciles de Estados Unidos (U.S. Marshals), capturaron a un ciudadano dominicano que figura en la lista de los 10 fugitivos más buscados, acusado de cuatro homicidios y narcotráfico en la ciudad de Nueva York.
La operación de búsqueda y captura permitió a las unidades especiales localizar a Luis Francisco Soriano, alias "Yefri" o "Yeyo", en las proximidades de la playa Arena Gorda, carretera El Macao, provincia La Altagracia, donde fue arrestado para dar inicio al proceso de extradición en su contra.
El detenido, de 32 años, es considerado un fugitivo de alto perfil. Se le acusa de estar vinculado a un cuádruple homicidio ocurrido el 31 de agosto de 2024, cerca de la ciudad de Rochester, Nueva York.
Dos de las víctimas eran niños de 2 y 4 años, según informaron las autoridades mediante un comunicado de prensa.
A Soriano se le imputan cargos por homicidio en primer y segundo grado, allanamiento de morada en primer grado, secuestro en primer grado, e incendio premeditado en primer y segundo grado, todos en el estado de Nueva York, Estados Unidos.
"Dada la naturaleza de los presuntos delitos del dominicano, su peligrosidad para la comunidad en general y su capacidad para evadir a las autoridades, el Servicio de Alguaciles de los Estados Unidos lo incluyó en la lista de los 10 fugitivos más buscados", indica el comunicado.
La detención de Luis Francisco Soriano refleja el firme compromiso del Gobierno dominicano de seguir fortaleciendo los lazos de cooperación con países aliados en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado transnacional.
Cuádruple homicidio
El pasado 31 de agosto de 2024, bomberos del poblado de Irondequoit, en Rochester tuvieron que sofocar un incendio en la vivienda de una pequeña familia de cuatro integrantes, donde encontraron los cuerpos de Fraime Ubalde, de 30 años; Marangely Moreno, de 26 años; Evangeline de 4 años y Sebastián de 2.
Las investigaciones determinaron que la familia de origen boricua no murió a causa del fuego, sino que previamente todos fueron apuñalados, informó Univision. La pesquisa concluyó que el incendio se originó después de los asesinatos.
