De acuerdo con representantes de juntas de vecinos, iglesias y sindicatos de transporte, la manifestación pacífica responde a lo que consideran un intento de despojo por parte de supuestos propietarios, sin agotar el debido proceso legal.
“Pero de nada vale que este municipio tenga calles asfaltadas, tuberías de agua y electricidad si no tenemos vivienda”, expresó uno de los voceros comunitarios, quien denunció que las autoridades pretenden desalojar a familias que han vivido por más de 30, 40 y hasta 50 años en el lugar.
Los manifestantes exigen al gobierno central que declare los terrenos en disputa como de utilidad pública, permitiendo así que los actuales ocupantes puedan adquirir sus solares a un precio justo, con el Estado como intermediario en la compra.
“La comunidad de La Caleta cuenta con unos 80 mil habitantes que hemos construido nuestras viviendas sin necesidad de que el Estado invierta en infraestructura habitacional. Lo justo sería que el Estado negocie con los supuestos propietarios y luego nosotros podamos comprarle directamente al Estado”, indicaron.
Los organizadores advirtieron que continuarán las jornadas de movilización si no reciben respuesta de las autoridades competentes.
