Un hombre y una mujer, ambos empleados de la Embajada de Israel en Estados Unidos, fueron asesinados a tiros la noche del miércoles frente al Museo Judío de la capital estadounidense, mientras se celebraba un evento del Comité Judío Americano (AJC), según confirmaron fuentes oficiales.
El ataque ocurrió frente a la oficina local del FBI, en una zona que permanece acordonada mientras la policía metropolitana de Washington D.C. continúa con la investigación. Testigos reportaron que el agresor, al momento de ser arrestado, gritó "Palestina libre".
De acuerdo con medios locales, al menos una de las víctimas fue trasladada en estado crítico a un hospital, pero no sobrevivió. Según el portavoz de la embajada de Israel, Tal Naim Cohen, ambos empleados recibieron disparos a quemarropa.

Condena internacional y creciente tensión
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, condenó el ataque a través de un comunicado difundido este jueves por su oficina:
"Estamos viendo el precio terrible del antisemitismo y la incitación salvaje contra el Estado de Israel. Los libelos de sangre contra Israel están en aumento y deben ser combatidos hasta el final", afirmó.
Netanyahu anunció también que ha ordenado reforzar la seguridad en todas las representaciones diplomáticas de Israel en el extranjero.
La oficina del primer ministro añadió que la fiscal general de EE.UU., Pam Bondi, se comunicó con Netanyahu para informarle del avance de la investigación y garantizar que el responsable será llevado ante la Justicia.
"El primer ministro le agradeció a ella y al presidente (Donald) Trump su postura firme contra el fenómeno del antisemitismo", señaló la oficina.
Voces desde Israel y EE.UU.
El embajador de Israel en Estados Unidos, Yechiel Leiter, reveló que la pareja asesinada estaba por comprometerse en Jerusalén:
"La pareja asesinada a tiros en nombre de 'Palestina libre' estaba a punto de comprometerse. El joven compró un anillo y tenía la intención de proponerle matrimonio la próxima semana. Juntos nos mantendremos firmes y vamos a superar la depravación moral de las personas que piensan lograr ganancias políticas con asesinatos", expresó.
Por su parte, el embajador de Israel ante las Naciones Unidas, Danny Danon, calificó el ataque como un "acto malvado de terrorismo antisemita", y exigió una respuesta contundente por parte de las autoridades estadounidenses.
El presidente de Israel, Isaac Herzog, también se pronunció:
"Es un acto despreciable de odio y antisemitismo", declaró.
El ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, advirtió que los representantes diplomáticos del país están especialmente expuestos al riesgo y pidió medidas adicionales de protección.
En Estados Unidos, la fiscal general Pam Bondi y la fiscal federal adjunta del Distrito de Columbia, Jeanine Ferris Pirro, se presentaron en el lugar del ataque.
"Oramos por las víctimas de esta violencia mientras trabajamos para conocer mejor lo que ha sucedido", dijo Bondi.
El director ejecutivo del Comité Judío Americano, Ted Deutch, organizador del evento en el museo, expresó su consternación:
"Estamos devastados por un acto de violencia atroz ocurrido fuera del recinto. Nuestra atención y nuestros corazones están con las víctimas y sus familias".
Las autoridades continúan la investigación del tiroteo en coordinación con la Embajada de Israel y se espera que en las próximas horas se ofrezca más información oficial sobre el atacante y sus motivaciones.